jueves, 26 de mayo de 2011

ahí

Ya, sin embargo para qué entender la secuencia inexacta
gritando un suspiro llevadero de causar un colapso neuronal
finjiendo quizas que me importa
lo que es llevadero de comprender en la locura espacial y sicotica
que desaparece entre el mediatico mundo de mi sintonía neurótica
yo no quería causar un escaso y rotundo despertar
yo queria mas bien esclarecer un poco la conciencia mediatica
aquella que mantiene alejada la memoria y atañe directamente ahí
donde se causan los placeres y el daño

ahora bien, supongamos que en el Con-verso de lo Di-verso
encontré la secuencia Per-versa....
lo que es yo... me queda Sub-vertir
el verso!!!
imaginando lo que es el Sub... y luego el Verso
me convertí en una militante combatiente del "Cambio"
de lo "tranformativo"
para esclarecer el verso
la palabra
lo escaso
de lo viviente
de lo.... intacto?
del corazon roto
de alma quebranta-da
de la justicia violada
de lo I-NO-CUO
de lo estallante
de la vida en sí!!!
de las letras
de lo que está
de lo que fué
de lo que irá
en mí
hacia.... allá
(el lugar donde estallan los girasoles)

lunes, 16 de mayo de 2011

Perverso y Cruel.-

Y nos propusimos un juego perverso, a ver quien era mejor en esto de dañar al otro. Tomaste mi columna por la espalda y la arrancaste en un solo tirón salvaje, vertebra por vertebra brotaron de mi piel... y de soslayo entonces me ví sin la base! sin la estructura que podía sustentarme. Pero de qué importa realmente el juego? si suficiente teníamos con odiarnos y mentirnos, claramente me dí cuenta que tenía un poco de desventaja en este juego, pero traté de ponerme rápidamente en primera fila, no podía ya dejarme inmolar claramente por esto.... el sentido de la batalla se perdió, pero la guerra por la sobrevivencia dió pie al intento de re- vivir alguna véz, después de que esa vez incrustaste tu avido cuchillo infame y arrancaste mi corazón, lo busqué por todas las calles de Santiago, pero en todas partes me decían no haber visto un corazón con tales características. (El problema fue que la ciudad estaba repleta de corazones rotos, era dificil reconocer el mío) Finalmente en un descuido de las calles, lo encontré agujereado y herido en un rincón entre Av. Irarrazabal y Seminario (no sé en que momento llegó a parar ahí), lo llevé de vuelta a una reparadora de almas rotas y dispusieron a coserme el pecho luego de esta pérdida encontrada.
Nos dispusimos a un juego violento, claramente tú llevabas la delantera y no sé en qué momento la vida se volvió nefasta. Pero sin embargo pasó que un día, luego de tu última embestida en que los azulejos de los pies se vieron desaforados, ese día en que los vidrios de las ventanas cayeron anquilosados, ese día en que la tierra rugió muy de adentro, ese día: yo gané.