domingo, 9 de octubre de 2011

la tristeza serena

En que tantas veces me asumo en un silencio latente
que realmente no sé muy bien si expirar la vida
o darla de baja por mal uso
guardo una conciencia perversa
y una retórica cruelmente ideada
guardo un abismo de ineptitud
porque me vislumbro en un estado de latencia taquicardica
en que no siento nada
por lo que siento, entiendes? perdoname por todo
no quise herir los límites
no quise profundizar los lamentos
no quise nuevamente quedarme sin estallar en girasoles
pero créeme que la distancia y la soledad
no es una solución que recree la eficiencia
ok, dale
tú ganas

como siempre mis cartas tienen destinatarios anónimos
cada quien sabe a quien le corresponde cada sintagma
las semiologías van dirigidas a lo silente
a quien aparece
y quien escapa
una vez más.-

2 comentarios:

  1. A veces es necesario herir límites, y profundizar en lamentos. A veces hay que hacer bien haciendo un mal, a veces y siempre hay que saber decir lo que conecta al estómago, el corazón y el cerebro para que los colapsos no causen cortocircuitos.

    Muy sentidas tus palabras, son entalladas y naturales, poéticas y denunciadoras. Un gran abrazo lleno de los mejores deseos.

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